El verano chileno me encanta, sobre todo porque de donde yo vengo, el verano significa 40˚c de la mañana hasta la noche asi que los 35˚c maxima en santiago son perfectos para mi.
Lo que al principio me parecía extraño, es esa fiebre de verano que cunde por todo el país: desde diciembre hasta fines de febrero TODO EL MUNDO SALE A VERANEAR! sean ricos o pobres, familias grandes, parejas sin hijos, grupos de amigos...en auto, bus, avión, tren, bicicleta y -lo he visto mas en Chile que en otros países- mochileando; asi le dicen cuando se van haciendo dedo por la carretera...y funciona! siempre hay un alma samaritana que accede a llevarte tan lejos como pueda.
Ir en esta época por la carretera es ver un desfile de idiosincracia chilena en pleno.
-Está la pareja de la tercera edad que viaja en su BMW o Mercedes Benz o cualquier otra marca "clasica" y muy cara, color gris plata. Van solos, el auto implecable, ni un bolso a la vista, los dos con lentes oscuros, el aire acondicionado a full, ventanillas cerradas y el marido conduce a 150km/hr como si no hubiera nadie mas en la carretera y su auto tuviera un seguro contra ancianos que creen que porque tuvieron la plata para comprar el super auto tambien tienen el cerebro y los reflejos para manejarlo.
-Mas atrás viene la familia Burrón (expresión mexicana para referirse a la familia grande que carga con los suegros, hermanos, tios, abuelos, etc.). Además de papá, mamá e hijos, vienen los abuelos (al menos de uno de los dos lados de la familia), los tios, primos, y hasta un vecinito de colado. Viajan en el furgon escolar, color amarillo por supuesto, todos apretujados, bolsos en el techo, en precario equilibrio formando una montaña que le hace competencia al Everest. Todas las ventanillas abiertas para contrarrestar el calor sofocante de la carretera y el estereo a todo volumen, todo el mundo con cara de vacaciones, la sonrisa fácil, cantando o hablando a gritos y comiendo un completito o un sandwich.
-En el auto de al lado viene la pareja joven en su 4 x 4. La mayor parte del tiempo con un par de amigos, todos de lentes oscuros -de marca por supuesto- y pegados al i-phone, incluido el conductor. Ellas bien maquilladitas, ellos bien afeitaditos, usando su ropa sport -zapatos de playa "guante" incluidos, porque lo relajado no quita lo fashion- oyendo a U2 y haciendo planes para llegar a la casa de Zapallar, dejar los bolsos e irse a almorzar al Chiringuito donde hay que ver y dejarse ver -está de moda comer en las "picadas"-, tomar sol por la tarde con el aperitivo y salir en la noche porque quedaron de verse con el Jorge y la Maca que "qué bueno que al final se compraron la casa en Zapallar y no en Cachagua porque acá hay mas gente como uno".
-Nunca faltan los que van de camping, de hecho yo creo que son los que mas hay. El auto (puede ser desde un "Palio" o un "Morning" que casi se deshace a un "Vitara" tres puertas de esos que salieron por ahi año 2001). Lleno el auto por todos lados, cargadito al punto de que se ve muy cerca del suelo, bolsos y mochilas en el techo, bolsas de dormir enrrolladas y metidas donde quiera que caben, sacos de carbón, bolsas de supermercado y las carpas. En este auto pueden ir todo tipo de grupos, amigos, familias, parejas jovenes con hijos, sin hijos, puros hombres, puras mujeres y casi cualquier edad. Es un espectáculo digno de ver, el camping en este país es algo serio; los lugares son preciosos, tienen todo acondicionado, baños, duchas, parrillas lista, enchufes de energía y varias comodidades mas, pero aún así sigue siendo una "experiencia salvaje".
-Finalmente vienen los que mas han captado mi interés: los que parece que se van a veranear con la casa a cuestas. Van en la gran camioneta, doble cabina para que quepa toda la familia y el perro y atrás llevan el armazón y colchón de -al menos- una cama, la cocina, sillas y mesa de comedor, sillas de playa, cobijas, pisos, maletas, la parrilla hecha de reciclado de aluminio...he visto hasta el refrigerador viajando!
Viaja todo el mundo, al norte o al sur, unos por dos meses, otros por el fin de semana, pero todos llevan esa cara de "veraneo" que yo solo he visto de manera generalizada en Chile. Es la mejor época del año, el sol pone de buen humor a la gente, no importa la crisis, no importa si el año no terminó como uno quisiera, o si les fue mal en la PSU. Durante Enero y Febrero se olvida todo lo que no sea pasarla bien, compartir con los seres queridos, desconectarse del mundo y recargar energías que duren hasta el próximo verano.
Ahora yo también tengo esa fiebre de Verano, y me encanta!
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